El estudio tiene como objetivo examinar qué sucede cuando se aplica Reconnective Healing® en las plantas.
Las hojas de las plantas se seleccionaron y se combinaron por tamaño y textura. Lo que se sabe es que cuando las hojas se separan de su fuente de vida (tallo o tronco) mueren. Cuando las hojas entran en este proceso de muerte, en realidad sangran, no sangre o fluidos, sino luz. La luz abandona a los organismos que mueren.
En este experimento, se permitió que la hoja de control de la pareja muriera de forma natural. La otra hoja de la pareja fue sometida a diferentes tipos de tratamientos energéticos.
Las hojas de control se dejaron morir de forma natural tardando entre siete y diez días. Las hojas se trataron con técnicas energéticas. Pero había una distinción interesante: con Reiki, la recuperación de la hoja comenzó rápidamente y luego se ralentizó con la misma rapidez; Con Qi Gong, comenzó más lento pero duró más. Pero con Reconnective Healing®, comenzó más rápido y se quedó MUCHO más tiempo ayudando a mantener viva la hoja, hasta 90 días.